Trauma

¿QUE ES UN TRAUMA?

La herida del trauma

El trauma es una "herida psicológica" que puede ser provocada por distintas situaciones. 

Para que se produzca un trauma psicológico es necesario que se cumplan tres condiciones: a) Que haya un hecho estresante. b) No tener los recursos emocionales y cognitivos necesarios para afrontar ese hecho. c) No tener la capacidad para procesar emocionalmente lo ocurrido, por lo que me quedo atascado en el recuerdo traumático.

Hay Traumas con "T" generalmente poco frecuentes (grandes desastres naturales o aquellos causados por el hombre, como guerras, accidentes, abusos, etc.), son acontecimientos generalmente inesperados de gran impacto emocional que agotan nuestra capacidad de afrontamiento; y traumas con "t", más comunes (desprotección, humillación, cambio de roles en la familia, etc.) pueden llegar a ser más peligrosos dado que no siempre somos capaces de identificarlos y se producen por la exposición reiterada a acontecimientos que dañan nuestra capacidad de afrontamiento. Se trata de “traumas acumulativos”. 

Cuando un evento produce un trauma psíquico, rompe nuestro equilibrio psicológico, nos pone en una situación de gran fragilidad emocional e incertidumbre. Posteriormente, aunque seamos  conscientes de que el “peligro” ha pasado, no logramos librarnos de las emociones y creencias negativas , ni de la sensación de malestar que se produjo.

El trauma, afecta a la persona en su salud, seguridad y bienestar, de manera que puede desarrollar creencias negativas falsas y destructivas de sí misma y del mundo.

CONSECUENCIAS DEL TRAUMA

Creencias negativas. Estas creencias pueden ser autorreferenciales: "soy  incapaz, soy miedoso, estoy indefenso, soy malo, no me quieren"; o a otro aspecto en particular: "soy incapaz de ser buen alumno; de cumplir mis horarios; de hablar en público, no sirvo para escribir, no debo ser exitoso". Estas creencias interfieren y dificultan la conducta. Otras consecuencias son Pesadillas, Ansiedad, nerviosismo e irritabilidad, Anestesia emocional, Indefensión aprendida, Culpa y vergüenza y Síntomas psicosomáticos, entre otros. 

Cuando estamos amenazados por un peligro emocional o físico nuestro sistema nervioso se prepara para reaccionar ante el peligro. La circulación sanguínea se dirige a los órganos vitales, el corazón late más rápido, aumenta el ritmo de la respiración, los músculos se tensan, y se agudiza un estado psicológico de alerta, etc. Una vez que el peligro ha pasado, este sistema de alerta deja de funcionar y vuelve a la normalidad. 

Ante una experiencia que por ser muy intensa resulta abrumadora y que implica dolor, vergüenza, miedo, horror o pánico, a veces el sistema nervioso no puede elaborar una respuesta de control y el sistema de lucha-huida se mantiene permanentemente en alerta y, a partir de ese momento, cualquier estímulo, por pequeño que sea, que nos conecte con el hecho traumático, gatilla reacciones, como si estuviera viviendo la situación traumática, teniendo reacciones inadecuadas en la situación del presente.

La mejor forma de sanar el trauma, en mi opinión, son las técnicas de integración cerebral EMDR, TIC, BRAINSPOTTING, etc) y las técnicas en las que se trabaja con las partes (IFS, ICV, etc).